Reflexiones del PRI sobre las Escrituras | Martes de la VI semana de Pascua
Evangelio
Juan 16:5-11
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos:
"Me voy ya al que me envió y ninguno de ustedes me pregunta:
'¿A dónde vas?
Es que su corazón se ha llenado de tristeza porque les he dicho estas cosas.
Sin embargo, es cierto lo que les digo:
les conviene que me vaya;
porque si no me voy, no vendrá a ustedes el Paráclito;
en cambio, si me voy, yo se lo enviaré.
Y cuando él venga,
establecerá la culpabilidad del mundo en materia de pecado,
de justicia y de juicio;
de pecado, porque ellos no han creído en mí;
de justicia, porque me voy al Padre y ya no me verán ustedes;
de juicio, porque el príncipe de este mundo ya está condenado".
Reflexión del Evangelio en palabras de Monseñor Don Fischer
Vemos en este pasaje algo que es muy humano. A los discípulos les dijeron que Jesús se iba, no esperaban que eso sucediera y se llenaron completamente de dolor. ¿Y estoy seguro de que estaban pensando principalmente en lo que nos va a pasar? ¿Qué va a pasar con este mensaje? Y lo que nuevamente les recuerda es que hay una verdad que el mundo no verá y que aún no ha visto, y ellos son quienes deben traerla al mundo.
Y él no les está diciendo que tienen que resolverlo todo. Tienen que saberlo ahora. No, él está diciendo que esto será algo en lo que crecerás. Y a medida que comprendan, los llevarán a una mayor comprensión.
Oración final
Padre, siempre habrá voces que contradirán todo lo que nos estás enseñando. Siempre oramos por la sabiduría para ver claramente lo que eres para nosotros y cuánto has hecho por nosotros. Ayúdanos a nunca flaquear en nuestro aprecio, en nuestro agradecimiento por tu mensaje. Y te lo pedimos en el nombre de Jesús, Amén.