Reflexiones del PRI sobre las Escrituras | Memoria de Santos Juan de Brébeuf e Isaac Jogues, presbíteros, y compañeros, mártires
Evangelio
Lucas 12:8-128
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: “Yo les aseguro que a todo aquel que me reconozca abiertamente ante los hombres, lo reconocerá abiertamente el Hijo del hombre ante los ángeles de Dios; pero a aquel que me niegue ante los hombres, yo lo negaré ante los ángeles de Dios.
A todo aquel que diga una palabra contra el Hijo del hombre, se le perdonará; pero a aquel que blasfeme contra el Espíritu Santo, no se le perdonará.
Cuando los lleven a las sinagogas y ante los jueces y autoridades, no se preocupen de cómo se van a defender o qué van a decir, porque el Espíritu Santo les enseñará en aquel momento lo que convenga decir’’.
Reflexión del Evangelio en palabras de Monseñor Don Fischer
Si quitas todas las capas y miras qué es lo que Jesús anhela establecer dentro de cada uno de nosotros, es la conciencia de Su Padre. Jesús vino a despertarnos a la divinidad, viviendo dentro de nosotros, infectando todo lo que nos rodea.
Así que tenemos en este mensaje una hermosa imagen de decir: uno no puede hacer la obra del reino, uno no sabrá cómo vivir en el reino de los cielos sin depender del Dios que habita dentro de nosotros. Él está ahí para guiarnos, para permitirnos tener éxito en lo que buscamos, que hace realidad el Reino de Dios.
Oración final
Padre, está claro que si queremos comprometernos a establecer el reino de Dios, si estamos aquí para traernos vida y paz unos a otros, tenemos que estar conectados contigo, Dios. Tu habitando dentro de nosotros, despertándonos, enseñándonos, fortaleciéndonos. Ésa es la esencia de todo el evangelio. Y te lo pedimos en el nombre de Jesús, Amén.